El gobierno de Ontario ha solicitado a Metrolinx, la agencia de transporte de la provincia, que explore un proyecto denominado “GO 2.0” para expandir significativamente el servicio de trenes GO en el sur de Ontario. Este plan, liderado por el premier Doug Ford y el ministro de Transporte Prabmeet Sarkaria, busca convertir líneas ferroviarias utilizadas para transporte de carga en vías de pasajeros, con el objetivo de aliviar la congestión en el área del Greater Golden Horseshoe. Entre las propuestas clave está la construcción de un desvío ferroviario de carga paralelo a la autopista 407, que conectará Milton y Bramalea, permitiendo un servicio más eficiente en las líneas de Kitchener y Milton.
La propuesta también destaca los beneficios de conectar nuevas líneas y estaciones, reducir tiempos de viaje y fomentar comunidades orientadas al tránsito. Según el gobierno, la congestión actual cuesta a la región $56.4 mil millones anuales, y se espera que esta cifra aumente drásticamente si no se toman medidas. Además, se menciona que este proyecto complementará otras iniciativas de transporte en la provincia, como las líneas LRT en Mississauga y Hamilton, y la línea Ontario Northlander. Aunque ambicioso, el proyecto enfrenta desafíos, como la colaboración con actores clave y la culminación de obras retrasadas como el Hazel McCallion LRT y el Eglinton Crosstown LRT.