Una encuesta recientemente publicada reveló que el número de personas sin hogar en Toronto se ha más que duplicado entre la primavera de 2021 y el otoño pasado.
La encuesta Street Needs Assessment (Evaluación de Necesidades en la Calle) de Toronto estimó que en octubre pasado había unas 15,400 personas sin hogar en la ciudad, en comparación con unas 7,300 en abril de 2021.
“Estos datos ponen en evidencia el fracaso de múltiples sistemas, como la vivienda asequible, el cuidado de la salud, la salud mental, el apoyo económico y el sistema judicial”, señala un informe de la ciudad.
“La gente se queda sin opciones, y el sistema de refugios o dormir en la calle se convierte en el último recurso.”
El informe indica que el aumento en Toronto refleja lo que también está ocurriendo en Ontario y en todo Canadá, después de que la pandemia de COVID-19 afectara directamente las tasas de personas sin hogar.
“Ciertos grupos siguen estando sobrerrepresentados entre quienes experimentan la falta de vivienda, lo que destaca la necesidad de inversiones específicas y apoyos especializados”, añade.
Según el informe, el 9% de las personas sin hogar en la ciudad se identificaron como indígenas, aunque los pueblos indígenas representan solo el 3% de la población total de Toronto. También indica que el 58% se identificaron como personas negras, a pesar de que este grupo representa el 10% de la población total de la ciudad.
La razón más común citada por la pérdida de vivienda fue la falta de ingresos, señaló la ciudad.
“La mayoría de las personas encuestadas reportaron al menos un problema de salud, como problemas de salud mental, alguna enfermedad o condición médica, y consumo de sustancias”, se lee en el documento.
El informe subraya que la crisis de vivienda requiere respuestas estratégicas, y que Toronto ya está comenzando a ver una reducción en el número de personas sin hogar gracias a la disminución de solicitantes de asilo en los refugios, menos campamentos callejeros y el traslado de personas a viviendas permanentes.
“Las personas dijeron que los factores principales que podrían haber evitado su situación de calle fueron programas de vivienda asequible, como el alquiler basado en ingresos (rent-geared-to-income), asesoramiento legal para inquilinos y apoyo con empleo o educación”, explicó el informe.
La ciudad informó que un total de 1,078 personas que vivían en la calle fueron referidas al sistema de refugios y que más de 4,300 personas fueron alojadas el año pasado.
“Durante la próxima década, la ciudad invertirá en hasta 20 nuevos sitios de refugio que serán más pequeños, más rentables y mejor adaptados a las necesidades de las personas que atienden”, añadió, señalando que ya se han seleccionado siete de estos sitios.
Más de 80,000 personas estuvieron sin hogar en Ontario en 2024, según la Asociación de Municipalidades de Ontario.
La asociación ha pedido un enfoque completamente diferente para abordar la crisis de personas sin hogar, uno que priorice soluciones de vivienda a largo plazo en lugar de medidas temporales.